sábado, 16 de mayo de 2015

Pronunciación Mamífera







Siempre espero en alguna tonelada.
En una especie de saludo con estimaciones
de genesis.
Siempre estoy de acuerdo si las cosas vuelven
a reinar sobre la brisa como objetos o
liebres que vuelven de una expedición
a las torres que algunos hombres
construyeron a base
de plastilina.

También aguardo en un kilometraje.
En los automoviles marrones de la definición.
En las narraciones del neologismo.
En las historias de esas ruletas que vuelven
de una batalla.
En las heridas que guardamos en los dedos
para que sólo sea la palabra quien pueda darle
forma en un texto.
Siempre estoy herido de carne o trascendencia
y sin mas constelaciones que las que habitan
un pulgar, mido la distancia de este
al indice. De este a los
velodromos.

En los filos.
En los bordes del lago.
En el punto donde los manantiales no son mas
que precipicios.
En las agujas y mi alimentación que no es a base
de minerales ni lechuzas que ven en el orden
de los reptiles una democracia 
con tatuajes.

Siempre en alguna orilla.
Exacto, extraño a mi mismo para intentar oirme.
Sedentario como un dinosaurio con
muletas.
En un anochecer de cines completados por
mamíferos.





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