martes, 27 de febrero de 2018

El Dirigible Amarillo




Visualiza la tarde un prisma.

El transfondo del aire en la brisa.
La escama de algodòn incrustada en los talones.

En los paraguas lo ardiente de cara al porvenir 
oprime la distancia. Entonces la distancia se convierte
en silaba.

La silaba silenciosamente camina hacia la
inspiraciòn

hacia las dimensiones que ha dejado la lucidez
en ella.

Entonces un dirigible amarillo a lo lejos

nos dice que se ha convertido en
palabra.



La Errante Estrella





Durante el dìa los ojos se equilibran en una imagen.
Ello sucede para perder la conciencia en otras.
En aquellas que no vemos.

Sin embargo eso no es el fruto de ninguna dialectica.
De alguna epistemologia en el hambre de
nuestros sentidos.

Ello no es màs que el fruto de cierta ritualidad
que baña desde hace siglos el infinito.

Durante el dìa la mirada en los ojos se equilibran en
una imagen.

Lo cual no es en el fondo màs que una sutil forma
de desvanecerse.

Propia del ser màs secreto en cada uno de nosotros

y de alguna errante estrella.








lunes, 26 de febrero de 2018

El Sol que Duerme




El sol duerme.
En uno de sus sueños brotarà algùn dìa una 
ceniza.

Pàjaros de madera cuelgan de las alas
de los buhos.

Navìos enteros de carne unen a sus siluetas
elementos como el salitre. Como un diario 
de sangre.

Los objetos pasan a travès de nosotros y viceversa.
Asi llegamos a extrañas orillas. Lugares son
de andanadas y profecìas. De grilletes
de arena en las sienes.

El sol duerme.

Quizà lo harìa con la esperanza que precede a un
despertar

a la mirada de una criatura ebria de luz entre la oscuridad

arrancando opuestos e indòmitas sabidurìas a su
penumbra.








sábado, 24 de febrero de 2018

Radiaciòn Cartesiana






En el tacto amarillo de las sienes cuando los buques
emigran a lo lejos entre los sonidos de una
lampara marina. En las axilas doradas de esas 
lamparas.

En la hoguera donde un cuchillo es iluminado 

por la nieve.

En las estrellas cuyo ùnico destino es llegar
a una supernova. Eso es inevitable.

A una constelaciòn de aceite en algùn hemisferio.
Las hay.

Cuando los inedito rasga un centro de piel
en la arena. Un centro donde los contornos escarban
por la noche sus propias mitologìas.

En las rafagas que despeinan la aurora con
un trazo de vidrio. De iones religiosos.
De santuarios semejantes a los que encierra un 
espejo debajo de sus hojas.

En el destello que asciende amarillo por la ventana
anunciando el ocaso. No sè si la vida de los dioses en ello.
Hay tanto de tragico y mortal en los crepùsculos.
Pocas iguanas pueden separar la vida de esos dioses 
de lo divino allì.

Y todo dios es tragico y mortal.
Lleno de inspiraciòn, Euclidiano.
Cartesiano segùn la radiaciòn de un pan en 
la mesa.

De un ser sediento y radiante en el alba
arrancando industrias de platino a lo luminoso.
A los filos de los rangos.

A esa estetica que toca el papel simplemente porque
es el ùnico lugar 

el ilimitado lugar

donde viaja a una metàfora.






El Espìritu del Lenguaje





Cerca del lenguaje hay un cuchillo.
Una vena por donde corre la nieve luego de haber
sido desgarrada; su color no es igual a la
sangre.

En la sangre hay otras intermitencias.
Quizà equidistancias o vaya uno a saber.
Sobrenaturales intervalos. Disposiciones con 
una moneda de sal
en el cuerpo. Una moneda de sal 
desprendiendose
de las sienes como una escama.
Una escama que a veces està compuesta de piel
como en otros seres.

Otras branquias lo confirman.
Aquello que llamamos felicidad a meridianos de distancia
del sueño, cuando no hay màs olivos ni
bacilicas a las cuales escupir.
Todo lo contrario.

Tù diràs sin embargo que entre los equilateros
hay otras nociones.

Tù sostendràs en las silabas que el horizonte
igual que alguna parte de nuestros poros respira y cuando no
se encuentra intuyendo. Tù diras y yo dirè que sòlo los pàjaros 
cuando son azules disputan y reclinan. Y enciman
o despliegan entre soledades de tallos
usualmente puntiagudos

usualmente diarios de leche que semejan
la vida de una toxina que arrancamos al sudor de un carbòn

cuando muestra su frente
igual a una
proposicion amarilla al final del oceano 

donde imagenes solitarias de se unen tambièn 
al desierto.