sábado, 19 de abril de 2014

Crepùsculo de Sarmata






Como un grado aquiescente.
O la organicidad.
A la innata trascendencia de una greva.
Y cuando un pecho se abre, buscamos observar
un corazòn muy de cerca. Pero hay màs.

La luna cae, alta y poderosa,
entre su incertidumbre, lleva propuestas de 
cuatro planetas que migran.

-no olvidemos el corazòn igual al cogito, es 
decir muy de cerca-

Planetas que migran revelando hipodromos
astros que somatizan al hombre
durante crepùsculos de sarmatas.

Y entonces la edad deja la escritura.
El cuento ortogràfico y el calendario de hormiga.
El mercenario pez que habitaba el interior
de nosotros es vomitado nuevamente a
la lluvia y es ahora tan especifico.
Tan dotado de nidos o artificios.

Asi que por el lago deforme del tronco
ascendemos finalmente a la enramada de lo 
jamàs nuestro, para aguardar la muerte.



Guillermo paredes

No hay comentarios:

Publicar un comentario