lunes, 8 de febrero de 2016
La Reuniòn de las Gasas
Hoy no he caminado a una pàgina.
Lo que pensaba de ella se hizo sutil
como un rostro.
El barco donde a veces dormìamos
disecaba en las bancas sus repelentes.
Los manuscritos en el jardìn dejaban de
ser asunto del delirio. Del lugar donde los solidos
migran con una mariposa en el lecho.
No he llegado a una pàgina ni he podido sentarme
en un parque donde el rendimiento de las hormigas
sobresalìan en un palido rostro.
Sin embargo vuelvo a ver las cosas de a diario.
Un espacio donde bailan en los espejos, gorjeos
y epigramas. Calles distantes y observatorios son
un pubis.
Atento a las voces oigo aquello que es primordial
cuando habla y nos dice que un parque no es el
principio del mundo. Es sòlo la figura de un tallo y los
niños formados por la tarde en circulos.
Hoy como si se tratara de una reuniòn con las
gasas, intentè llegar a una pàgina. El horizonte era
un reloj en la escarcha y hablaba de escamas
de raices con un pensamiento.
De tendencias afiladas a un hipodromo de agua;
temerarias en una recogimiento de visagras.
Ello parece cosa del reloj y los pasillos.
De las palmeras que logran encanecer.
De las galerìas donde una muchacha de hierba
es iluminada.
Y el resplandor no se dirige a otro ser ni a si misma.
Deriva hacia extraños satelites.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario