sábado, 7 de marzo de 2015
Bandadas
Es un dìa entero sobre las
cubiertas, quièn sabe sobre el aceite
y las fuentes que desarrolla la naturaleza al
convertirse en fruto o navìo que toca una efigie,
un grito en ella llega hacia las goletas como
una inflexiòn literal que determina un sentido mortal
como las avenidas y
mientras
un astro parece ser iluminado por los pàramos,
un hilo asciende a una fuente de agujas con
el estertor del relàmpago.
Macizo es el libro romàntico de una pua
donde yerran las serpientes, la oraciòn de hoja
en los labios. Macizas formas de gemas
buscando una alta voz de ministerio
en la complicidad de la yesca con
la llama.
Es un dìa entero y tù accedes a olores
de purpura gelatinoso en las yemas.
Desfila la mueca de roble entre los
purgatorios.
Asciende a la brisa la punta de marfil
de desencanto.
Asciende a la brisa una flauta de nieve
escondida del verano.
El equilibrio es una extraña armonìa pero
no para los desembarcos.
Tomamos hegemonias y cavidades.
Los dioses se juntan en lo boreal.
Allì los astros vuelven a nuestros hemisferio
utilizando la creaciòn.
Y es el infinito y no nuestra inspiraciòn
quienes los vuelven bandadas.
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