jueves, 1 de junio de 2017
Los Unos y los Otros
No es lo suficientemente amarillo.
No mentan las cosas que circulan entre los dijes
-valga la redundancia- amarillos.
No llenan de cascaras uno que otro platino
que otros concedieron.
No creo que sea su intenciòn tampoco.
Entonces cùales son las intenciònes de las cuales provienen.
Cùales sus abanicos.
Cuales sus adjetivos que quisieramos oir primitivos.
Cùales el seno con un ùnico pubis en singular
descolgandose de las constelaciones.
El brillo -por decirlo- de sus tijeras cuando desfiguran
el viento -digamos- o esgrimen citas arrancadas
a las baquetas de un gimnasta
cuando toca un tambor debajo de la lluvia.
-tendrà eso que ver con lo sagrado-
Y ellos responden que nosotros no somos lo
suficientemente enigmaticos para incrustar dimensiones
sobre la tierra.
-segun ellos es lo que hacen-
Còmo entonces comprender a seres que llegan
desde afuera y vivieron amamantados por la quincha
y la cera.
Còmo comprenderlos desde sus propios relieves.
Seres asi obviamente percibiràn la existencia de
otra manera.
Intuiràn en el primer piso de un edificio como lo
hace la goma.
Despertaràn entre la quintaescencia de un gorro negro
y pobre.
Masticaràn una hoja como lo hiceron sus antepasados
inspirados ademàs por los oleajes.
Cultivaràn gatos.
Recordaràn que padecimos alguna vez por la quinta
espada del marxismo.
No es suficientemente amarillo.
-nadie dijo que tiene que ser del color que deseamos-
Ademàs eso no es importante.
En el fondo cuando te sientas frente al mar las cosas
dejan de ser importantes.
La naturaleza facilmente arranca las presunsiciones
y delirios a los unos y los otros.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario