Diario del Logos

Nos trasladamos entre itsmos.
Igual que standares...
Convencionales.

Ampliando conceptos como la gresca
del brillo y sus siluetas
dentro de los torbellinos
donde viajan.

Poeta y desarrollo de casos
paradigmaticos
sin necesidad del nombre 
o del hambre
pero en ellos.

Con el breve estado del 
canto mientras se repliega
hacia un pensamiento.

Y tiene que olvidar su melodìa 
para ceder a otra.

Invadiendo frisos como lo 
hace el indicio del carbòn o
esa acogida periferica
al entonar 
el espacio que apea
un universo
uno que cae como el 
azogue
de noches antediluvianas.

Del cual nos alimentamos...

Creyendo que hallaremos
allì el diario
del logos.


Guillermo Paredes Mattos