lunes, 6 de marzo de 2017

Orientaciòn del Lenguaje






El lenguaje desciende por el carbòn con una hoja de nieve.
Los tambores de mercurio hacen lo mismo.

Antigua es la inteligencia que roza sus ancestros con un
hilo de carne. El verbo? El verbo como casi siempre
anhela el agua.

Sobre las siluetas un punto de sombra llega a una pregunta.
En los fosiles el dia es de algas y cofres.
De mochilas que se prolongan. De una ciudad como la
que habito; En una de sus puertas son oprimidas
epifanìas.

El lenguaje vuelve a las calles, pero para ello debe ser
abstracto.

El silencio oprime alguna de sus etiquetas; todas estàn 
llenas de pròlogos. La nada empieza a renacer sobre si misma.
Bien sabe que todo renacer sucede entre las cosas.

Elixires de jabòn en un evento contemporaneo de sirtes.
Voces y columpios en las ojeras de un niño que lleva
una mandarina en la boca.

Los edificios vibran psicològicos en una medalla de
hambre. Parpadea el violìn entre las nervaduras.
La palmera alcanza un monòlogo.

El lenguaje desciende por el carbòn. En ese lenguaje
las efigies esbozan manadas de heliotropos. Epicentros
de galaxias donde se forma una especie de luna o en
su defecto las sienes de las iguanas.

Barcos de limòn parten hacia las alcantarillas.
El estuario vuelve al desierto reclamando sus escamas.
Parte de un archipielago llega al deterioro.

Nombres de espìritus sobre los templos despertando
entre circulos de magnesio.

El lenguaje desciende. 

-no es nada que no sepamos o ya haya sido dicho-

Se debe añadir ademas que  viento aguarda tal como 
entre antorchas era esperado.

Es decir con un fantasma de carne en el pecho.







No hay comentarios:

Publicar un comentario