miércoles, 3 de diciembre de 2014
El Desarrollo de las Uvas
Mi estado no es de algo que se dedica a las cosas.
-los estadios y procesos de ese estado, tampoco-
Existe un remordimiento que significa libelulas.
Un castillo de escencias bàsicas como la nieve.
Esos son versos y podrìan decirme de que manera
se sostiene un estadio en un poema, pero creo que
el poema puede escribirlo de manera independiente,
guiado por muselinas o sedas. Tambièn guiado
por pianos y escafandras.
Pero escribir en un poema, diciendo que no me dedico
a algunas cosas, no significa ni ello ni lo contrario, es
sostener el mismo poema de manera elastica y equinoccial,
tal vez de cabeza. Puramente quizà en los racimos.
Absolutamente en una alegoría.
!Tan relativo es el lenguaje cuando lo acompaño!
Y ya que descubro lo contrario como una ciudad
de celulas epistemològicas en este poema, escribo
de èl atandome a una bolichera y a los cantos tan
lejanos de un cartilago. Casi dormido y dominado
por la niebla. Finalmente compuesto de audifonos
y polvo.
Un poco màs allà de la fisica de este poema hay un
enjambre. La idea que tengo de èl es tambièn un
tanto crepuscular como la lluvia o las gaviotas que
duermen encerradas en el pico del pelicano.
En èl vivì hasta oir el desarrollo de las uvas. Allì
como un metodo de peregrinaciones ejercitandose
en misteriosas palabras. Algunas forasteras como
el sueño. Otras prontas a disecarse como algunos
recuerdos en la memoria.
Mi estado -reitero- es sòlo la llegada a las uvas.
Una conmemoraciòn de la gaviota encerrada en
el pico del pelicano en mi memoria.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario