lunes, 20 de septiembre de 2010

Morfologìa Poètica

Hablo del bosque como un estado.
Del interior hablo desde sinuosas transparencias
-volàtiles e invisibles, anodinas-
Alguien posò en una de sus venas, primaveras.

Escribo tan ajeno, igual que un obrero
lleno de felicidad, cantando en musculos
de promiscuidad, empinado cual adolescencia
de crines, pensando como tradiciòn de jardìnes.
-Nosotros retratamos, laberintos all-
-Nosotros albergamos, el corazòn de su morgue.-


Las luces nos separaban
Los brillos son desasimientos.

Un seminario donde reinabamos llenos de exodos.
El homicidio de pubertades -sin gènero- probablemente
bellezas, entre levantamientos de pòcimas
y practicas en estereo,
nada màs pertrechos de azogue.

Y ese interior transparente.
Vidente de ninguna eternidad.
Estrella oficial e inepto aliento
de mi obrero.

Y -nuevamente- en ese descubrirlo todo
-casi todo-, probablemente todo-
este lèxico recogimiento no siempre es
un descenlace.


Como el hombre, sòlo vive
a medias.



Guillermo Isaac Paredes Mattos.

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