viernes, 7 de diciembre de 2012
La Sensibilidad de las Cenizas
No recuerdo dìas oficiales.
Dìas que asciendan a una marisma.
Diàs de escolleras. Con palcos en
los bodegones de un molusco.
Siento muy poco, todo lo que mi sensibilidad percibe
-no siente- es muy poco.
No hablo del sentir, es un sujeto tàcito en
el poema, por màs que no quiera. Es una hiperbole
en todo.
Pero tampoco es aquello que quiera o deje
al lado del sol como un abandono.
Por ello...
Veo tramites en un espejismo donde
cartas de ensueño encaminan
el juego de las supersticiones.
El jardìn donde un amuleto siembra la aurora.
A esa hora las mariposas y los pianos en el
mundo estàn despertando a los hombres.
A veces he sido el primero en tocar el
celeste con que desplazan la noche.
A veces sòlo he mirado.
Pero lo que jamàs he podido evitar
es ser devorado por una sola de sus cenizas.
Guillermo paredes mattos
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