viernes, 31 de agosto de 2012

Experiencia Gnostica de lo Divino I





Buscaba aquello sin direcciòn.
Que al unirse no tuviera que sostener el
peso de los àngulos.
En todo àngulo tiembla en secreto un hombre.
Un adivino.
Alquien que preludia -ya no moralmente-
Alguien que escribe, pero no literario.
Literario o no, soñè que me diera biografìas o datos
personales de sì mismo.
Que negara o afirmara bajo esa luz que ondula
debajo de la tierra.
Entre los eufemismos, que casi siempre fueron mìos.

Como un muerto levantandose del nicho sin memoria.
Despertè para encontrar aquello que
mi recuerdo grabò sin ninguna esperanza.
La esperanza es una masacre espìritual.
La esperanza es sòlo una carnicerìa.
Allì todo lo que puebla la conciencia
es lconjurado para emprender el viaje
a su diluvio.

A terminos hebreos de diaspora.

De exodo.

Hubiera deseado ofrecer algo que tuviera
no tantas noches, pero sì
el escrupulo que amenaza al hombre con
su peso divino.

Bajo terribles balanzas donde el destino
se rie de nosotros.

Porque jamàs las podremos
soprotar.




Guillermo Isaac paredes mattos



No hay comentarios:

Publicar un comentario