sábado, 28 de abril de 2012

El Corazòn de la Silaba




He sido una palabra que alargaba su mano
sin saber a dònde.

Un rito de piedra y a veces de
topacio.

Escribì de la continuidad, caminè por el hecho
de saberme indeciso, porque la voluntad
conspira en la belleza antes
de despertar una figura.

Vivì en un desierto, lo elegì en una caverna
donde los mitos eran auroras.

Comprendì que ambos se unen
para buscar esa distancia, intentando
desaparecer su corazòn de los navìos.

Pero ello es imposible.

Soy una palabra.

Ni tan metòdica, ni centinela de su espina cuando
se convierte en arbusti este mudo.

Este hombre sin lengua que ahora te habla y me habla.

Ese aliento con mas indicios que tejidos
o epitafios.

Buscando descansar en esa horrible inspiraciòn que
ocasioalmente separan dos silabas.



Guillermo Isaac Paredes Mattos






1 comentario: