Perfiles de espadas y pièlagos
donde liricos densiòmetros unen lo oseo
en una costumbre de cìnicas praderas.
Bordes que juntan ardientes esporas
cuyas palabras redimen veranos sin espinas
concientes del sol y un universo de agua.
En ese relato convivimos con sueños
en esa narraciòn guìamos al aire
y quebramos las ventanas de todo infinito
para que nada logre detenerlo.
Por ello no creo en eternidades. Llenan
el barro de ìdolos, por ello idealizo antes
que el espejo reflejo el pensamiento de una lìnea
cuando abandona el poema.
Y entre circos de enjambres mi propòsito
escenica el record de una apariencia
donde las cùpulas desprenden estelas
como el mito o el lenguaje de aquì
a los manantiales.
Y entre naves de inspiraciòn cedo a tribunales
a personajes de dioses bañados de venas,
venas sin un solo punto de sangre.
Y solo ante el infinito
continuo este viaje, este hipocrita
desasimiento entre mi carne y su entraña.
Formando lagunas de teatros.
Guillermo paredes mattos
lunes, 21 de febrero de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario